Una vez te soñé
Esta noche respiro nuevamente tu aire. Respiro ese aroma inmortal que contamina
todo. Ese tipo de oxigeno que conocía sin saber que existía en algún lugar del
universo y que al poco tiempo, terminó inundando como un diluvio profético cada
espacio en donde tránsito. Muero de vida al palparte sin tocarte, al respirarte
a fondo cuando coincidimos en algún sueño de los ángeles. Llevo años persiguiéndote
en la misma historia frívola del tiempo que nos hizo encontrar una noche mientras
dormía. Como esa noche, han llovido miles de noches iguales sobre mí. Y es la misma
esencia de manzana virgen atravesándome los pulmones, el mismo cielo huérfano sobreviviendo
a su manera y el mismo noviembre fugaz que suicida sus pecados en un bar de
silencios rotos.
Comentarios
Publicar un comentario